Nº 2.391 / ENTREGA CON EL PAÍS EL DOMINGO 24 DE JULIO DE 2022 EN ESPAÑA Y PORTUGAL
Mallorca,
planeta
Barceló
Así es la vida del artista en sus refugios creativos de la isla
por Borja Hermoso fotografía de Jean-Marie del Moral
VANDANA SHIVA:
CUIDAR LA TIERRA ES LA
VERDADERA ECONOMÍA
por Berna González Harbour
GUITARRICADELAFUENTE,
UN SONIDO PROPIO
por Fernando Navarro
E L O B J ETO
La luz al final del día
F OTO G R A F Í A D E J UA N C A R LO S D E M A RCO S
E S T I L I S M O D E A N A RO M É
T E X TO D E TAC H Y M O R A
Desde la Antigüedad, la luz ha sido símbolo de vida.
Ya en la caverna de Platón, los humanos salen de la penumbra y acceden al conocimiento cuando son bañados por el sol. Este objeto representa en cierto sentido ese complejo solar: es a la vez una lámpara, un soporte para plantas (vida) y una mesita auxiliar que puede atesorar agua, comida o libros (conocimiento).
Su altura y su bandeja superior permiten estos usos añadidos y expanden su utilidad durante el día. Por su multifuncionalidad, es una pieza pensada para espacios pequeños y, aunque está diseñada para resistir a la intemperie, por su estética, encaja también en los espacios interiores. Su forma, con reminiscencias de una cesta de ratán, es un diseño del estudio Mermelada para la firma catalana Estiluz. Se llama Bols y está
disponible también en otra versión con una altura mayor, lo que permite crear composiciones y jugar con los volúmenes si se combinan los dos modelos. EPS
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